La señorita Kate Daltry no cree en cuentos de hadas. . . ni en los felices para siempre.
Obligada por su madrastra a asistir a un baile, Kate conoce a un príncipe... y decide que es cualquier cosa menos encantador. Se produce un choque de ingenio y voluntad, pero ambos saben que su irresistible atracción no los llevará a ninguna parte. Gabriel está prometido a otra mujer, una princesa cuya mano cumplirá sus despiadadas ambiciones.
A Gabriel le gusta su prometida, lo cual es una buena noticia, pero no la ama. Obviamente, debería cortejar a su futura esposa, no a la ingeniosa y empobrecida belleza que se niega a adularlo.
A pesar de las madrinas y los zapatitos de cristal, éste es un cuento de hadas en el que el destino conspira para destruir cualquier posibilidad de que Kate y Gabriel sean felices para siempre.
A menos que un príncipe abandone todo lo que lo hace noble...
A menos que una dote de corazón rebelde triunfe sobre una fortuna...
A menos que un beso al filo de la medianoche lo cambie todo.
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