Cora ha tocado fondo. Ha escapado de su relación tóxica y ahora se enfrenta sola a un mundo frío. Ya no es la joven romántica que alguna vez fue, ahora está retorcida, una mujer rota que anhela una oscuridad que no puede describir. El regreso del mejor amigo de su hermano, Jamie, la distrae de su ruptura, pero no es suficiente.
El es un hombre misterioso, dañado en la guerra, sus cuerdas vocales le causan problemas para hablar; Cora se involucra un poco con el hombre diferente. Debería haber sido suficiente para frenar su perverso apetito por las cosas oscuras y retorcidas, pero no lo hace, todo cambia cuando Scream Kingdom llega a la ciudad.
Cada Halloween, el carnaval ambulante llega a la ciudad trayendo consigo todas las cosas espeluznantes. Este año, tiene un regalo extra para Cora, que tiene un encuentro en la noche de apertura con un hombre enmascarado que le hace cosas indescriptibles.
Ella se niega a ser una víctima y, en cambio, decide jugar al gato y al ratón con el maníaco de la vida real.
Empezar un juego del gato y el ratón nunca es una buena idea, especialmente cuando tu oponente es un extraño altamente entrenado.
Cora se vuelve adicta al monstruo que la lastima y la persigue, encuentra un consuelo enfermizo en eso.
Cora está desgarrada, está comprometida con el dulce Jamie que vive en su casa, pero es adicta a sentir al hombre enmascarado con la lengua perversa.
No ganará este juego, no puede.
No cuando los dos hombres entre los que está atrapada son la misma persona.
El juego nunca fue suyo para ganar, él jugó para ganar todo el tiempo, y todo lo que realmente quiere es escucharla gritar.
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