Cuando era niña, él fue mi héroe. Jamás soñé que fuera un jefe de la mafia con oscuridad en su alma.
Años después de mi encuentro con Killian Callahan, el hombre entra en mi pastelería. Bromea diciendo que encontrarse después de tantos años es el destino. A mí no me hace gracia. Cada vez que me visita, mi enamoramiento se vuelve más intenso.
Cuando un mafioso intenta extorsionarme, Killian interviene, revelando quién es realmente. Despiadado. Violento. Posesivo. Eso me asusta... y al mismo tiempo aumenta mi deseo por él.
Killian me advierte que me mantenga alejada. Las vírgenes inocentes y hermosas como tú no están hechas para una vida como la mía. Sin embargo, te necesito, Lucy... tus curvas, tu sonrisa, tu todo. Pero amarme será tu ruina.
Cuando era pequeña, bromeaba diciendo que yo era su "amuleto de la suerte" porque hice que la tormenta se detuviera. Ahora, una nueva tormenta está rugiendo, y está en mi corazón.
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