Southern Chance
Los secretos nunca permanecen ocultos en el Sur.
Kallie
Me enamorĂ© de Ă©l cuando tenĂa siete años. Me raspĂ© la rodilla y Ă©l me ayudĂł llevĂĄndome adentro.
Nuestra historia de amor fue la comidilla del pueblo hasta que una mujer le dijo a todo el mundo que estaba embarazada de su bebĂ©. La Ășnica soluciĂłn racional era largarme del pueblo y no regresar jamĂĄs.
Mi mejor amiga necesitaba un lugar donde esconderse, y no hay nada mĂĄs escondido que la granja de mi familia, asĂ que volvĂ. Por ella. Se suponĂa que iba a ser temporal y que no iba a verlo, pero eso es lo que pasa cuando vives en un pueblo pequeño donde todos se conocen.
Jacob
Ser el sheriff de un pueblo pequeño nunca fue mi sueño. Mi padre murió y mi hermano mayor se marchó, asà que tuve que ser yo quien cuidara de mi madre. Me quedé. Cumplà con mis deberes de hijo y protegà mi pueblo natal.
Mi vida no era perfecta, pero estaba contento. Hasta que me encontrĂ© con un fantasma de mi pasado, Kallie. PensĂ© que era mi imaginaciĂłn, no podĂa ser. La amĂ© la mayor parte de mi vida, pero ahora la odiaba.
La fĂĄbrica de chismes de la ciudad iba a toda marcha. Mantuve la cabeza gacha y la mente alejada de la mujer que destrozĂł mi corazĂłn cuando huyĂł. No me dio la oportunidad de explicarme, no le importaba entonces. Yo no le importaba.
Nunca se promete una segunda oportunidad, pero ahora que tengo la mĂa justo delante de mis narices, no estoy seguro de poder aprovecharla.
2. Southern Confort
Los secretos nunca permanecen ocultos en el Sur.
Olivia
Cuando te enteras de que tu prometido ha sido arrestado por estafar por mĂĄs de diez millones de dĂłlares a sus clientes, haces lo que harĂa cualquier mujer en su sano juicio. Escapas de la realidad y pasas a la clandestinidad, cambiando tus Louboutin de chica de ciudad por unas botas de vaqueros color calabaza.
No era un cambio para siempre, era temporal. Solo tenĂa que quedarme aquĂ hasta que se arreglaran las cosas en casa, o eso creĂa yo.
Casey
Ya montaba a caballo antes de caminar, o al menos eso me dijeron. Siempre supe que me harĂa cargo de la granja familiar. Lo llevo en la sangre.
Campesino de corazĂłn, en cuanto la vi arrastrar su equipaje por el camino de grava supe que ella estaba fuera de mi alcance.
No deberĂa haber empezado nada con ella, porque sabĂa que solo estaba de paso.
No pude evitarlo, me enamorĂ© de ella. Aunque sabĂa que, al final, me dejarĂa.
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