La Lista Caliente: es un código para propiedades caras que se venderán en un santiamén.
Es el sueño de todo agente inmobiliario, y yo no soy diferente. El dinero fácil es mi tipo favorito.
Excepto que mi cliente, el imbécil despreciable que es, no quiere que esto sea fácil en absoluto. Al menos, no para mí. Ha ido a mis espaldas y ha contratado a otro agente.
Ha convertido esto en una maldita competición.
Podría haberme echado atrás y tomármelo con calma... pero entonces vi a quién me enfrentaba.
Audrey: Sexo andante, un culo que no se rinde, la reina de las magdalenas deliciosas... y la única mujer por la que siento verdadero odio.
Hace tres meses me robó algo.
No puedo recuperarlo, pero puedo hacer algo mejor... Puedo robarle a ella.
Voy a ganar este pequeño juego. Nada me detendrá.
Eso es lo que pienso, hasta que la veo semidesnuda. Hasta que recuerdo cómo se siente su cabello entre mis dedos... cómo huele, cómo suena cuando se le corta la respiración en la garganta.
Se suponía que esto sería una dulce venganza.
Pero ganar este juego podría costarme más de lo que nunca imaginé.
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