De la riqueza a los harapos… Del control al caos… Pero el asesinato… ¿en serio?
Después de que su ex marido la dejara en la estacada, a Doreen Montgomery, una mujer de la alta sociedad, la oportunidad de una nueva vida se le presenta en la forma de la vieja y destartalada casa de su abuela Nan en la pintoresca Kelowna… y con el trabajo añadido de cuidar los animales que Nan no pudo llevarse a vivir con ella: Thaddeus, el locuaz loro gris africano con un vocabulario de adultos, y su amigo, Goliath, un gato de tamaño monstruoso con una actitud igualmente monstruosa.
Es el nuevo comienzo que Doreen y su querido basset hound, Mugs, necesitan desesperadamente. Pero, justo cuando las cosas comienzan a mejorar para Doreen, el gato Goliath y el perro Mugs encuentran un dedo humano en el jardín invadido de Nan.
Y no solo un dedo. Cuando la policía comienza a excavar, aparece el resto del cuerpo y resulta estar relacionado con un antiguo crimen sin resolver.
Con su abuela como principal sospechosa, Doreen pronto se encuentra tropezando con pistas y sacando de quicio al cabo Mack Moreau, mientras hace todo lo posible por demostrar que su querida Nan es inocente del asesinato.
Bones In The Begonias
De riquezas a harapos… El caos continúa… Los asesinatos abundan… ¿En serio?
Se suponía que la nueva vida de Doreen Montgomery en Kelowna iba a ser un nuevo comienzo después de una desagradable separación de su esposo de catorce años, además de una oportunidad para orientarse y volver a encarrilar su vida. En lugar de eso, pasó su primera semana en su nueva ciudad desenterrando cadáveres, siguiendo pistas e interponiéndose en el camino del Cabo Moreau.
Pero ahora que el viejo caso se ha resuelto y el asesino ha sido llevado ante la justicia, Doreen cree que esta semana las cosas pueden ir como ella quiere. Cuando Mack la contrata para arreglar el jardín de su madre, parece una segunda oportunidad, tanto para el nuevo comienzo de Doreen en Kelowna como para su incipiente relación con Mack.
Pero, en lugar de desenterrar las begonias de la señora Moreau y plantarlas en un lugar mejor, Doreen descubre otro conjunto de huesos… y otro misterio que resolver. A medida que se acumulan las pistas, Mack deja muy claro que no quiere ni necesita su ayuda, pero Doreen no puede resistirse al atractivo de otro misterio. Mientras ella y Mack se pelean y persiguen pistas falsas, la abuela de Doreen, Nan, hace apuestas sobre quién resolverá primero el cr*men.
Todo mientras el asesino vigila…
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De riquezas a harapos... El caos se calma... El crimen se calma... Pero, ¿de verdad?
Después de verse involucrada en dos casos de asesinato en el poco tiempo que lleva viviendo en la pintoresca Kelowna, la divorciada y jardinera Doreen Montgomery ha adquirido una reputación casi tan notoria como la de su abuela. La única forma de evitar que la gente especule es vivir una vida de aburrimiento sin tregua hasta que los medios de comunicación y los vecinos se olviden de ella. Y Doreen se propone hacer precisamente eso con una visita a los famosos Jardines de Claveles de Kelowna. Plantas, más plantas, y nada en absoluto que nadie pueda objetar.
Pero cuando ve una pelea entre una hermosa joven y su novio, no puede evitar preocuparse. Lo suficiente como para seguir a la pareja desde el aparcamiento y atravesar la ciudad. Y cuando los disparos interrumpen la plácida tarde, es demasiado tarde para preocuparse de cómo se sentirá su némesis, el Cabo Mack Moreau, al verla involucrada en otro de sus casos.
Con cadáveres apareciendo en los claveles y una conexión con un caso sin resolver de un niño desaparecido hace mucho tiempo, Doreen tiene las manos llenas, sobre todo tratando de mantener su participación en las investigaciones en secreto de Nan, Mack Moreau, y especialmente de los medios de comunicación. Pero alguien está al tanto de lo que hace Doreen... y ese alguien no puede permitirse que ella encuentre las respuestas a las preguntas que se hace.
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De la riqueza a los harapos... El caos se calma... El crimen ronda... Y los casos sin resolver no cesan...
Después de casi un mes en la pintoresca Kelowna, Doreen Montgomery sigue sin poder mantener su notoriedad al mínimo ni su nariz fuera de los asuntos ajenos.
Ahora los que sufren la pérdida de un ser querido acuden a ella en busca de ayuda.
Aunque lo último que quiere Doreen es que los medios de comunicación descubran que está involucrada en otro caso sin resolver, ya está enganchada a los detalles...
Pero aún hay más.
Se ha sabido que la vieja casa de Nan está repleta de valiosas antigüedades, antigüedades que Nan coleccionó y dejó para Doreen, y los elementos más sórdidos de su encantadora ciudad están rondando como buitres.
Con sus animales en modo completo de ayudante, debe investigar el caso sin resolver, corregir los errores del pasado y mantener su casa a salvo, todo ello mientras esquiva a los medios de comunicación y al Cabo Mack Moreau.
Evidence in the Echinacea
De la riqueza a harapos… Del control al caos… Pero asesinato… bueno, tal vez…
El éxito de Doreen en la resolución de asesinatos ha llegado a los noticiarios de todo el país, pero todo lo que ella quiere es que la dejen en paz. Tiene antigüedades que llevar a la casa de subastas y una relación con el Cabo Mack Moreau que resolver, por no mencionar una nueva amistad que cultivar con Penny, la primera amiga de Doreen en Kelowna, y Doreen no quiere arruinar las cosas.
Pero cuando una sorprendente acusación sorpresa no deja en paz a Doreen… sobre la muerte de George, el difunto marido de Penny, y hecha por uno de los hombres que Doreen ayudó a encerrar… piensa que quizá no haga daño echar un vistazo rápido al pasado de su nueva amiga.
Antes de que se dé cuenta, está haciendo malabarismos con un caso sin resolver, un caso cerrado y un posible homicidio piadoso… además de cultivar sus relaciones con Penny, Mack y las mascotas de Doreen: Mugs, el basset hound; Goliath, el gato Maine Coon, y Thaddeus, el loro gris africano demasiado hablador. Y aunque Mack ya debería estar acostumbrado a las travesuras de Doreen, cuando ella se sumerge en otro de sus casos, eso se vuelve cada vez más difícil de llevar…
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De la riqueza a los harapos... Del control al caos... Pero el asesinato... ¡esta vez no!
Una noche, hace diez años, Crystal, de ocho años, desapareció de su cama en casa de sus padres, la única evidencia una huella pisada el parterre bajo la ventana de la niña.
Ahora esa huella ha reaparecido, esta vez en la escena de otro crimen, y Doreen tiene órdenes estrictas de no meter las narices en la nueva investigación del Cabo Mack Moreau.
Pero mientras Mack está ocupado con el nuevo caso, Doreen piensa que no le vendrá mal echar un vistazo al antiguo. Su casa está vacía, sus antigüedades retiradas y tiene tiempo libre. Ha terminado de trabajar en el jardín de Penny y necesita un nuevo proyecto que la mantenga ocupada… y le permita evitar el trabajo pesado que le espera en su propio jardín. Y con la ayuda de sus ayudantes, el loro Thaddeus, el Maine Coon Goliath y el Basset Mugs, pronto Doreen está ocupada navegando por el mundo de las casas de empeño y el chantaje mientras busca pistas sobre lo que le ocurrió a la niña robada de su dormitorio hace tantos años.
Seguramente, no es culpa suya cuando su caso se topa con el nuevo, ¿verdad?
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