Él debería ser mi enemigo. En cambio, se ha convertido en mi Papi.
Erik Leonard es un hombre bruto que está decidido a derribar mi mundo y destruir mis recuerdos de la infancia. Es un dios vikingo musculoso con un traje hecho a mano, y lo único que tengo para ofrecerle a cambio de su ayuda es mi cuerpo.
Pero él quiere mucho más. Aceptará mi pureza, pero quiere que mi corazón y mi alma lo acompañen en el viaje.
Ha dejado en claro que nuestro acuerdo no deja lugar a la negociación. Cuando le dije que haría cualquier cosa, me creyó. Ahora, dice que le pertenezco y que nunca puedo irme.
Y una vez que veo detrás de la cortina oscura de sus ojos, no estoy segura de querer alejarme. Al final, ¿el hombre que nunca creyó en el amor será el que destruya mi corazón?
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