The Caveman's Virgin
Desde la primera vez que Abel la vio, no habĂa duda en su mente de que ella serĂa suya. Esta dulce virgen atrapada en una tormenta, empapada y frĂa, y nadie mĂĄs que Ă©l por millas.
Con la tormenta furiosa fuera de su cabaña y ambos atrapados dentro, no sabĂa cuĂĄnto auto-control podrĂa tener a su alrededor. Fue en ese momento cuando la vio por primera vez que supo que no podĂa dejarla ir, que Shea estaba destinada a ser suya en todos los sentidos. Solo tenĂa que convencerla de que se quedara, que vivir fuera de la red con un hombre de las cavernas era exactamente donde se suponĂa que debĂa estar.
Shea deberĂa haber tenido miedo del extraño que apareciĂł en el momento exacto en que necesitaba ayuda. Era grande y musculoso con un ambiente de hombre de montaña. La forma en que la miraba hacĂa que su cuerpo se calentara de una manera que nunca antes habĂa experimentado.
Cuando la trajo de vuelta a su cabaña en medio del bosque, tal vez deberĂa haberse asustado. Pero la verdad era que nunca se habĂa sentido mĂĄs en casa, como si estuviera en el lugar correcto, con la persona adecuada.
Shea era virgen pero sabĂa una cosa con certeza ... No serĂa inocente por mucho mĂĄs tiempo.
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