A spicy christmas with her boss
Estas Navidades, sólo tenía un objetivo: sobrevivir a la fiesta de fin de año de la oficina sin pasar vergüenza delante de mi jefe. Pero un muérdago, un beso robado y una noche entre sus brazos lo cambiaron todo.
Derrick Lawson es todo lo que un jefe no debería ser: terriblemente guapo, silenciosamente intenso y el único hombre que ha hecho que mi corazón se acelere desde el otro lado de la habitación. Pensé que nunca me vería como algo más que su empleada, hasta que me detiene en la puerta y me pide que me quede. Cuando sus dedos se posan en mi brazo y nuestras miradas se cruzan bajo el resplandor de las luces de Navidad, sé que mis deseos navideños están a punto de hacerse realidad.
Pero cruzar esa línea podría ponerlo todo en peligro. Mientras nos dejamos llevar por la magia de las fiestas -y de cada uno de nosotros-, una cosa está clara: esta Navidad será inolvidable, y tal vez, sólo tal vez, Derrick Lawson sea todo lo que siempre he deseado.
Estas Navidades tenía un plan: escapar de la ciudad y encontrar consuelo en una apartada cabaña de montaña. Sin plazos ni distracciones, sólo yo y la paz de la nieve. Pero una confusión en las reservas y un vaquero inesperado han puesto patas arriba mi retiro navideño.
Jase Lawrence es todo lo que no esperaba: guapo, exasperantemente estoico y el único propietario del rancho que creía tener para mí sola. Con la llegada de una tormenta de nieve, nos quedamos encerrados juntos, y mis esperanzas de soledad se ven reemplazadas por miradas compartidas junto a la chimenea y la calidez de su sonrisa fácil.
Es tan indómito como el paisaje que nos rodea, un hombre arraigado en la sencillez mientras yo me he perdido en el ajetreo de la vida urbana. Mientras cortamos leña codo con codo y decoramos un árbol de Navidad improvisado, las barreras que he construido empiezan a desmoronarse.
Pero enamorarme de Jase significa enfrentarme a una elección para la que no estaba preparada. A medida que la magia de la temporada nos envuelve y la línea entre extraño y algo más se difumina, una cosa queda clara: esta Navidad no va según lo planeado, y tal vez ese sea el mejor regalo de todos.
Esta Nochebuena, tenía un plan sencillo: cerrar la cafetería familiar y enfrentarme a otra tranquila noche a solas. Pero el destino tenía otras ideas cuando Trystan -el chico que una vez fue mi mejor amigo y mi primer amor- volvió a mi vida, cubierto de nieve y con un uniforme de marine que hizo que mi corazón diera un vuelco.
No esperaba volver a verle, y mucho menos ofrecerle un lugar donde quedarse cuando un vuelo cancelado le deja tirado. Bajo el resplandor de las luces navideñas y con una taza de chocolate caliente, resurgen viejos recuerdos y se encienden de nuevo las chispas entre nosotros. Pero dejarle entrar significa arriesgar los muros que he construido alrededor de mi corazón desde que se fue.
A medida que nos dejamos llevar por la magia de la época -y de cada uno de nosotros-, una cosa queda clara: esta Navidad lo cambiará todo, y quizá, sólo quizá, Trystan sea todo lo que siempre he querido.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario